VACACIONES
SETIEMBRE 2014
Miércoles,
27 de Agosto del 2014
Queridos amigos,
Les
escribo estas líneas con motivo de mi próximo viaje, el que me tendrá ausente
de la oficina y de nuestras lecturas cotidianas, desde el lunes 1 hasta el
29 de Setiembre próximo.
Durante
estos días no tendré acceso regular al Internet ni a mis correos.
En
los últimos meses, la situación internacional se ha seguido complicando tanto
social, económica, financiera y geopolíticamente, de acuerdo a lo previsto en
mi carta de Mayo pasado.
Más
aún, el problema geopolítico se ha agravado notablemente, con la
guerra entre Israel y el movimiento terrorista Hamas, en la Franja de
Gaza.
En segundo lugar, el sorpresivo éxito en el Medio
Oriente del movimiento ISIS y el nuevo Califato, aprovechando el
vacío dejado por la retirada de las fuerzas norteamericanas de Irak, tomando a
sangre y fuego importantes áreas en el Medio Oriente y redefiniendo las
fronteras geográficas impuestas por los poderes facticos después de la 2da
guerra mundial, obligando a Obama y el gobierno norteamericano a intervenir
nuevamente, inicialmente con un bombardeo de la zonas en guerra, poniendo
así en grave peligro la precaria estabilidad del Medio Oriente.
Y
en tercer lugar, pero no por ello menos importante, la
peligrosa situación de Ucrania, enfrentando a Rusia con Europa y cuyo
desenlace final aun está en germinación y es imprevisible, donde algunos
analistas conocedores del tema, prevén lo peor.
Por
otro lado, aunque la bolsa americana ha seguido su tendencia alcista y el
dólar fortaleciéndose, sin embargo ello no guarda relación alguna con el
comportamiento fundamental de la economía, que no logra aun tomar la senda de
un crecimiento sólido y sustentable a mediano y largo plazo, por lo
que una corrección importante en cualquier momento no debería ser una sorpresa.
El
crecimiento económico europeo se encuentra en franco deterioro y
el Banco Central Europeo tendrá que tomar medidas importantes a corto plazo, si
quiere evitar una crisis mucho más grave. La pérdida acelerada del
valor del euro en las últimas semanas, contra el dólar y otras monedas
importantes, es un indicador de la delicada situación de la economía de la
zona euro, ahora agravada por sus propias sanciones económicas a Rusia,
luego de los problemas en Ucrania y el ataque a un avión de civiles por parte
de la tropas apoyadas por Rusia y que terminara con cerca de 300 vidas
humanas. La estrategia y las acciones geopolíticas de Vladimir Putin,
parecen haberlos colocado en un callejón sin salida.
A
ello debemos agregar el fracaso del impulso monetario y fiscal a la
economía en Japón, del así llamado "Abenomics" y
la incertidumbre del futuro de la economía China y la falta de
transparencia sobre la verdadera situación económica, entre otros.
Por
otro lado, las deudas de los estados han seguido su trayectoria ascendente,
mientras que al mismo tiempo las economías vienen creciendo a tasas muy
cercanas a cero o negativas, o por lo menos, muy por debajo de las
expectativas de los economistas y los funcionarios de los gobiernos y los
bancos centrales.
Y
por si fuera poco, los bancos sistémicos se han hecho aún más grandes, no se
han reformado adecuadamente y el sistema financiero internacional aun
no logra fortalecerse suficientemente, por lo que muchos analistas y
economistas, dudan de que este podría resistir una próxima crisis,
similar o mucho peor aún que la del 2008, la que es ya inevitable.
En
verdad, lamentablemente, nada positivo podemos decir de lo sucedido en el mundo, desde mi
última carta a Uds. en Mayo pasado.
El ajuste económico y estructural a la "nueva
normalidad" ("new normal") aún está pendiente desde la crisis
del 2008, incrementado a un nivel exponencial cada vez mayor, por la
grandes emisiones inorgánicas por parte de los bancos centrales de todo el
mundo y por los mayores desequilibrios de las consecuencias involuntarias
y la inherente distorsión por la ineficiente inversión de los recursos
financieros provenientes de dichas políticas.
Por todo ello, la prudencia es cada vez el socio más aconsejable en las inversiones, sobretodo a corto plazo.
Con un cordial abrazo, me despido de Uds. hasta el regreso a mis actividades, Dios mediante, a inicios de Octubre próximo.
Gonzalo
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